Queridos amigos:

¡Arte en Madrid cumple un año!. Os confieso que me parece mentira. Cuando comencé a “hacer pruebas” el pasado 16 de enero, viernes, para saber cómo era esto de hacer un blog, no imaginé llegar hasta aquí.

Ha sido un año divertido, con gran parte de mi escaso tiempo libre dedicado al nuevo blog, paseando, visitando edificios, jardines y museos, haciendo fotos, leyendo y escribiendo sobre este querido y a menudo maltratado Madrid.

Y lo más importante, ha sido un año muy enriquecedor, compartiendo historias, hablando de Madrid con vosotros. Lo mejor ha sido descubrir la blogosfera y conoceros, aunque a la mayoría solo de forma virtual, he tenido la inmensa suerte de ir encontrando personas estupendas, con los que poder charlar, y a algunas también visitar, casi todos los días en sus propios blogs, con otras hemos intercambiado información e inquietudes por correo-e… Para mantener vivo un blog hace falta tiempo, por supuesto ideas, pero lo más esencial es estar a gusto, sentirse bien acompañado, y yo así me siento, por lo que doy las gracias a todos.

Gracias infinitas a nuestro Matritensis que dejó ¡¡el primer comentario!! 😉 y me anunció generosamente en su fantástico blog Es Madrid no Madriz.

Gracias a todos aquellos que desde entonces con vuestros comentarios me habéis ayudado a tener ilusión, a aprender cosas nuevas, habéis abierto nuevos caminos con vuestras sugerencias y habéis creado el buen ambiente que reina en una agradable tertulia.

Muchas, muchísimas gracias a los amigos más fieles, que estáis siempre ahí. No os voy a nombrar a todos porque no quiero olvidar a nadie, pero ya sabéis que me encanta charlar con vosotros, y que sois lo mejor de toda esta historia 🙂

Y gracias a todos los que nos habéis visitado alguna vez, que han sido muchos (al menos a mí me lo parece). A los posibles lectores de algún artículo, y a aquellos que acaso hayan vuelto de vez en cuando porque algo les haya interesado. Y naturalmente a los lectores habituales que, aunque silenciosos, con su presencia animan a seguir adelante.

Y, en fin, un agradecimiento especial a Celia, que me animó desde el principio, y me ayuda aportando sus magníficos trabajos, y a Fernando, Ricardo, Juan Pedro, y Ramfis, que han colaborado con sus artículos.

Y que cumpla muchos más, en vuestra compañía.

Saludos y besos

Mercedes