Como vimos en el artículo publicado a finales de 2014 dedicado al Madrid romano, durante las famosas obras de soterramiento de la M-30 tuvo lugar un hallazgo muy importante. Junto al Puente de Segovia, en la avenida Virgen del Puerto … aparecieron restos de un pequeño caserío.
Eran estructuras de edificación de los siglos I-II, que ya estaban documentados… Se hallaron suelos empedrados, fragmentos de pinturas murales, zócalos, y una estructura hidráulica.
Hoy volvemos al Puente de Segovia para conocer mejor esa villa romana que en aquellos momentos nos pareció tan importante y tan desconocida. Gracias a dos circunstancias.
Nunca podremos ver esos restos porque la construcción del colector que provocó el hallazgo siguió adelante y todo desapareció. Pero fueron estudiados y debieron ser trasladados al Museo Arqueológico Regional en Alcalá de Henares. En la actualidad sí existe una, aunque más que escasa presencia en el Museo de San Isidro. Dos pequeñas piezas, discretos testigos del pasado, que veremos.
Y sobre todo a que ahora disponemos de valiosa información y bibliografía sobre el tema, gracias a Aldo Petri, uno de los arqueólogos que trabajó en esta excavación.
Entonces yo desconocía en qué lugar estaba situada exactamente la villa romana localizada en el Paseo Virgen del Puerto. Gracias a su comentario supe que el hallazgo se produjo en la pequeña cuesta que desciende hacia la sala “La Riviera” junto al Puente de Segovia.
Sin duda la villa fue construida en un buen lugar, junto al río; las tierras debían ser ricas, aptas para cultivos y propicias para la crianza de ganado. Es difícil imaginarlo, pensemos que ni siquiera existía el puente hoy llamado de Segovia; aunque desde muy antiguo debió existir un vado, ya documentado en la edad media. Allí desembocaban las aguas de un arroyo que bajaba entre dos cerros, cursos que con el tiempo recibirían los nombres de arroyo de las Fuentes de San Pedro (hoy calle de Segovia) y río Manzanares.
Las noticias sobre la presencia romana en estos terrenos se remontan a los comienzos del siglo XX cuando Fidel Fuidio –igual que había ocurrido, recordemos, en Villaverde durante sus paseos con los alumnos por las orillas del Manzanares en busca de sílex– documentó el hallazgo de restos de cerámicas junto al Puente de Segovia en los desmontes realizados por entonces. Aunque la certeza y gran hallazgo llegó hace pocos años, como ya vimos, durante las obras de soterramiento de la M-30.
El hallazgo se produjo durante la excavación de una rampa de acceso a la zanja del colector de la calzada interior del soterramiento entre el puente de Segovia y el de San Isidro.
La excavación puso de manifiesto que estos terrenos fueron ocupados al menos en tres fases distintas a lo largo de dos siglos y medio, –con un breve intervalo entre ellas pues no se detectaron niveles de abandono–, entre mediados del siglo I hasta finales del siglo III.
La zanja excavada, entre dos pantallas, una de pilotes y otra de un parking cercano, solo permitió actuar sobre unos cien metros cuadrados que atravesaban la villa romana. Se desconoce su tamaño total pero se estima que la villa no era tan modesta. Se trataba de un pequeño conjunto residencial de cierta entidad.
Este enclave pudo formar parte de un camino en dirección este-oeste que atravesaba lo que hoy es la ciudad de Madrid cruzando el arroyo Abroñigal (Puente de Ventas) hasta llegar a esta zona y cruzar el río desde Complutum en dirección a Guadarrama.
La conclusión de los arqueólogos fue que su dimensión e importancia debía ser similar a las villas de Villaverde y Carabanchel, todas ellas formando parte de una serie de asentamientos rurales a lo largo de las riberas del Manzanares vinculados al mencionado núcleo urbano de Complutum.
Así lo indican la importante presencia de pintura mural y la gran variedad de tipos de cerámica Terra Sigillata Hispánica hallados.
La zanja atravesaba una parte del peristilo y una habitación de la villa. A unos seis metros de profundidad los hallazgos fueron notables, en cuanto a restos constructivos y restos materiales.
Entre los restos constructivos, en lo que debió ser el centro del atrio se localizó una estructura hidráulica, parte de una pileta construida en opus signinum, un material utilizado en la Roma antigua, decorada en su interior con un pequeño zócalo.
La zona del peristilo aún conservaba parte del pavimento y fragmentos de pintura mural. Se encontraron seis tramos de zócalos en varios niveles de suelos, en muros de una anchura entre 50-60 cm.

Museo de San Isidro. Moldura decorativa (51-300 d.C.) Villa romana del Puente de Segovia (pieza cedida en depósito por el Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid)
Entre los vestigios destaca la pintura mural con fragmentos que correspondían al menos a dos espacios domésticos por su diferencia en cuanto a colores y motivos. Los muros de las estancias no se pudieron documentar porque estaban fuera de la zona de excavación pero la cantidad y calidad de los fragmentos hallados de pintura en distintas tonalidades y tipos dan muestra de su interés.
Algunas de las piezas tenían líneas rojas sinuosas sobre un fondo blanco simulando mármol –como sabemos, la técnica del trampantojo ya fue utilizada por los griegos y los romanos–, otras de mármol auténtico y teselas de algún pavimento no localizado. Todo ello demuestra el gran valor de los elementos decorativos.

Museo de San Isidro. Pintura mural (50-300 d.C.) Villa romana del Puente de Segovia. (pieza cedida en depósito por el Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid)
Recordemos que los restos localizados anteriormente en otras villas (Carabanchel, Villaverde…) revelan, aunque dentro de la sencillez propia de lo que eran construcciones rurales, que siempre había un intento de dotarlas de una decoración exquisita y de comodidades a la manera de Roma.
Y en segundo lugar la cultura material es importantísima pues facilita información acerca de la época, forma de vida, etc. Se hallaron materiales metálicos, líticos, óseos, y sobre todo cerámicos.
Se recuperaron muchísimos fragmentos, más de siete mil, aunque en general debido al pequeño tamaño de la mayoría resultó muy difícil la reconstrucción de su forma completa. Aún así se identificaron cuencos, platos, copas… utensilios domésticos que describen la vida de los pobladores de la villa. Este tipo de material se encontraba en las zonas que se supone eran habitaciones delimitadas por muros de piedra y adobe enlucido.
En general eran piezas lisas, aunque algunas estaban decoradas. Se pudo diferenciar los tipos, la cerámica común, utilizada en los utensilios domésticos, en los que se almacenaba, cocinaban y comían los alimentos. Ollas, platos, cuencos, fuentes, botellas… útiles de cocina. Y otra cerámica digamos más refinada, empleada en útiles de mesa.
Además se localizaron teselas de mármol y piedra caliza, restos de Sigillatas Negras y Brillantes y otras cerámicas además de la mencionada Terra Sigillata Hispánica.
———
Aunque en el Museo de San Isidro solo se exponen dos fragmentos entre tantos vestigios hallados, merece la pena ir a verlos y contemplar las vitrinas y zonas dedicadas al Madrid romano, a las residencias señoriales o villas, los mosaicos de Carabanchel, etc.
Y observar la maqueta que representa una de estas villas …
… e intentar imaginarla habitada por sus pobladores junto al Manzanares hace más de diecisiete siglos.
Por: Mercedes Gómez
———-
Bibliografía:
VEGA MIGUEL, Jorge; PETRI, Aldo; HERRERA VIÑAS, Teresa; CUESTA, Marta. “La villa romana del Puente de Segovia” en Vides Monumenta Veterum. Madrid y su entorno en época romana. Vol I. Museo Arqueológico Regional, Alcalá de Henares, 2017.
VEGA MIGUEL, Jorge; PETRI, Aldo; HERRERA VIÑAS, Teresa; MENDUIÑA GARCÍA, Roberto; MÉNDEZ MADRID, Juan Carlos; FERRER MEJÍA, Genaro y CARRASCO SÁNCHEZ, Ángeles. “La villa romana del Puente de Segovia (Madrid)”, en Actas de las octavas jornadas de Patrimonio Arqueológico en la Comunidad de Madrid. Madrid, 2011.
CABALLERO, Carlos. “Madrid romano: nuevos puntos de vista”, El nuevo miliario, nº 3, dic. 2006.
24 comentarios
Comments feed for this article
19 septiembre 2017 a 19:27
davidguty77
Querida Mercedes,
Precisamente he estado esta mañana viendo la transformación del museo y esas piezas que has indicado. Un pena que no se haya conservado nada pero al menos sirvió para saber un poquito mas de la presencia romana en Madrid. Como siempre, muy educativos tus posts. Besos
19 septiembre 2017 a 23:53
Mercedes
¡Hola David! qué casualidad, ¿has visto las piezas hoy? la verdad es que me alegró mucho verlas pues pensaba que no había nada… pero siempre antes estos hallazgos me pregunto, con lo poquito que tenemos en Madrid, porqué va todo al MAR y apenas se expone nada. No me gusta esa situación. En fin.
¡Muchas gracias y besos!
19 septiembre 2017 a 19:33
PEPA
Gracias Mercedes. Muy interesante, como siempre.
19 septiembre 2017 a 23:54
Mercedes
Gracias, Pepa, me alegra que te haya interesado!
19 septiembre 2017 a 20:17
Emilio Guerra
Muy interesante. Solo falta que el Ayuntamiento señalizara el lugar, indicando que allí se encontró una villa romana
19 septiembre 2017 a 23:56
Mercedes
Hola Emilio, muchas gracias. Pues tu sugerencia me parece muy buena, deberían explicarlo. Un buen panel sería algo estupendo.
20 septiembre 2017 a 00:18
mariapazramos
Mercedes como siempre, qué interesante. Mil gracias
20 septiembre 2017 a 22:42
Mercedes
Me alegro, Mª Paz, ¡gracias!
20 septiembre 2017 a 08:50
Jembres
Interesantísimo! Desconocía la istroria de este caserío romano! Gracias!
20 septiembre 2017 a 22:42
Mercedes
¡Gracias a ti por tu comentario!
20 septiembre 2017 a 11:05
Mariarosa
Se cuida muy poco nuestro pasado. La idea de señalizar y explicar lo que allí hubo es muy buena, es la forma de no borrarlo del todo de nuestra memoria, y en esa explicación indicar lo que podemos ver en el Museo de San Isidro… Gracias por tus descubrimientos
20 septiembre 2017 a 22:46
Mercedes
Poco a poco vamos conociendo nuestra historia mucho mejor, y hay que contarlo para que se conozca. Y en ello nuestros magníficos museos juegan un papel principal. ¡Gracias por tu visita!
20 septiembre 2017 a 13:40
fonso10t
Me uno a la idea de poner una placa indicando la existencia de una villa romana en las cercanias del puente de Segovia, es una forma de intentar preservar nuestro pasado antes de que nos carguemos todo resto. Un saludo e interesante artículo
20 septiembre 2017 a 22:47
Mercedes
Gracias por tu apoyo y tus palabras, a ver si hacemos llegar la petición y se consigue, no creo que sea algo muy costoso y sin embargo tendría mucho valor.
¡Un saludo!
21 septiembre 2017 a 02:03
Marcos
Este post, Mercedes, es de cuadro de honor! El Madrid romano, nada menos! Estoy seguro de que hay más cosas esperando ser descubiertas. La villa de Madrid nos dará más sorpresas. Una pena que no se excavara más, pero las obras avanzan con una voracidad imparable. Me uno a la sugerencia de la señalización y comparto que los restos del antiguo Madrid deberían estar en los museos de la capital. No por chovinismo, pero es que como dices, hay tan poco de aquellas épocas que los restos que hay, se integran mejor en el relato de los museos de la ciudad, como el de los orígenes. Mis felicitaciones para ti, una vez más! Besos
22 septiembre 2017 a 00:29
Mercedes
¡Gracias, Marcos! es que es nuestra historia más antigua, llena de incógnitas pero también más certezas cada día, un bonito mundo por explorar ¿verdad?
Se van descubriendo cosas a causa de las obras, pero nunca se excava (al menos desde hace años) en busca de algo, que seguro, como bien dices, está ahí, esperando. Ojalá eso cambie alguna vez.
Y lo de los museos, yo comprendo que desde que se creó el Regional a él van destinados los hallazgos… ¡Y es un museo maravilloso! pero me gustaría que se sacara nuestra historia, la de la ciudad, de los almacenes y se mostrara más, y que preferentemente fuera aquí, en su lugar, Madrid. Por lo que decía, ¡tenemos tan poco! que merecería un “relato” completo, utilizando tus palabras 🙂
¡Besos!
22 septiembre 2017 a 13:54
Marcos
Todo un mundo por explorar, claro que sí. Comparto una pequeña anécdota personal. En 1997 fui a Madrid con un grupo de aquí de Mendoza, era una larga gira por España (la más completa que he hecho) y nos alojamos en el hotel Florida, frente a la estación del Príncipe Pío. Recuerdo perfectamente a nuestra guía decirnos: “Estamos frente al Madrid más antiguo, los orígenes de la capital”, eso porque desde la calle del Hotel se veía el palacio y la catedral, que descansan sobre la ciudadela musulmana. Por eso era el Madrid más antiguo, pero quién nos iba a decir que allí abajo, había un Madrid más antiguo todavía, una villa romana en el Puente de Segovia! Desde luego, el hallazgo, merecía una excavación más completa, pera la modernidad…Abrazos!!
22 septiembre 2017 a 22:14
Mercedes
Hola, Marcos, me encanta que compartas tus recuerdos de ese viaje con nosotros, muchas gracias, debió ser maravilloso, ¡ahora entiendo que conozcas tantos pueblos y ciudades españolas!
Desde luego hay mundos por descubrir, y la pena es todo lo que se ha destruido y/o ocultado. Y de lo que no cabe duda es de que hubo asentamientos desde muy antiguo, ¡poblados en la edad del bronce!, esta villa tan importante, aunque rural…
Pero fíjate, creo que, mientras no se demuestre lo contrario, Madrid como ciudad, como villa, fue fundada por los árabes en el siglo IX.
Todo conforma nuestra historia, que seguro nos deparará sorpresas, algún día.
Besos!
26 septiembre 2017 a 11:57
Salvador Quero Castro
Hola, Mercedes, me reincorporo tras el paréntesis estival. Es cierto que los hallazgos romanos en el área del Manzanares tienen especial predilecciónpor los vados del río, así ocurre con los hallazgos del Puente de los Granceses, Puente de Sagovia, vado de Santiago (villa romana de Villaverde) y vado de Iván Crispín. Lo mejor documentado es la villa de Villaverde excavada por Péres de Barradas en 1927 y por Jorge Juan Fernández en 1982 y finalmente arrasada en 1984 para la construcción del Nudo Super Sur. También están muy bien documentados los restos encontrados en la Torrecilla y finalmente los escasos restos del Puente de Segovia. Además de las villas, entre el vado de Santiago y el de la Torrecilla, se encontraron restos de canalizaciones y vidrios romanos que se encuentran en el Museo de San Isidro..
Besos
26 septiembre 2017 a 18:22
Mercedes
¡Hola, Salvador! bienvenido de vuelta, espero que hayas disfrutado este verano.
Tu comentario, como siempre, aporta información valiosa y útil, así que me lo guardo. La pérdida de la villa de Villaverde es una gran pena, y los últimos descubrimientos en Carabanchel… parece mentira que una ciudad como Madrid no haya sido capaz de mostrar ningún hallazgo de su rica etapa romana en su lugar. Hubiera sido magnífico.
Menos mal que tenemos el Museo de San Isidro, que nos muestra algunos hallazgos y su historia. Iré a ver esos restos de canalizaciones… no los recuerdo ahora.
Muchas gracias y besos
27 septiembre 2017 a 13:04
Salvador Quero Castro
Los restos de canalizaciones no están expuestos, eran unos restos que había en la vega del Manzanares, en la orilla izquierda con tégulas romanas y distribuidores de riego, además de numerosa cerámica sigillata y algunos vidrios. Los vidrios y la cerámica sigillata sí están expuestos en el almacén visitable.
Un abrazo
27 septiembre 2017 a 14:17
Mercedes
¡Ah vale, gracias, Salvador! Sí, ese almacén visitable es una maravilla, me gusta mucho visitarlo.
Hasta pronto!
4 diciembre 2017 a 23:15
Madrid del siglo IX al XI, “una medina ajetreada”. El Madrid islámico en el Museo de San Isidro. | Arte en Madrid
[…] han existido grupos de población, más o menos estables, en la edad del bronce, incluso alguna villa romana, aunque eso no significa que existiera un núcleo […]
28 mayo 2018 a 00:11
Un paseo al siglo I. Visita a la Villa romana del Puente de Segovia. | Arte en Madrid
[…] existió. Recordemos, antes de continuar, el gran hallazgo, cómo era esa villa, que ya contamos aquí. Terminaba el artículo entonces con la fotografía de la maqueta de una villa romana que se […]